Kaizen, un proceso de mejora continua
>> martes, 3 de marzo de 2009
Siguiendo la filosofía de esta web, ya sabéis, lo sencillo es bello; explicaremos lo que el Kaizen o mejora continua puede hacer por nosotros, y/o nuestra organización.
Actualmente muchas empresas utilizan el Kaizen de una forma mecánica, técnica. Aplican diferentes métodos y ahí queda todo. Y aún siendo importante para notar beneficios a medio y largo plazo, no es suficiente. Tiene que ser algo más, ha de penetrar como agua bendita en todos los integrantes de la organización. Ya sean operarios, mandos intermedios o altos directivos. Es una actitud, una forma de vida, pensar que pasamos una tercera parte de nuestro tiempo en el trabajo.
Y éste ha de ser como un hogar, un lugar donde todos tienen cabida, donde se crezca como persona y como profesional. Los trabajadores asumen un papel activo, no son simples recursos productivos. Ahora deciden y contribuyen a mejorar su puesto de trabajo. Aportan ideas y forman grupos de trabajo junto a directivos y demás personal de la empresa para mejorar continuamente.
El aprendizaje es global, penetrando y fluyendo por toda la empresa, fomentando y premiando la creatividad.
Cualquier organización que no lo entienda de esta manera, estará condenada al fracaso. Muchas veces sacrifican o dejan marcharse a buenos trabajadores por un orgullo mal entendido. Síntoma inequívoco de no saber trabajar en equipo... Pensar que normalmente los trabajadores más valiosos son los que se van, precisamente los que tendríamos que amarrar y no dejar escapar.
Como decía Jack Welch, ex-presidente de G.E: jamás contrato a nadie que vaya a ser el último puesto de su carrera. La empresa mejora continuamente, pero también sus empleados-colaboradores.
Dejaremos para más adelante algunas técnicas que pueden ayudar en la búsqueda de la mejora continua. Pero lo fundamental es entender el valor humano que ello implica y contagiarlo al resto de la organización. Lo demás lo podemos encontrar en las tiendas.
Deja de quejarte y pon un poco de Kaizen en tu vida...
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